Somos el futuro de nuestro presente

Unas nuevas elecciones han acabado y todo vuelve a ser lo de siempre. Los que anoche se quejaban del resultado, hoy se olvidan porque hay fútbol y juega España. La pena y la decepción en las personas, parece irse cuando encuentran una nueva cosa que les llene, casi como ese tipo de personas que un día tienen una pareja y a los dos días de dejarlo, otra diferente. Está claro que el ser humano, producto de su egoísmo se vuelve a cansar de todo lo que vive rápido, y no vive la experiencia ni el disfrute, si no que quiere la inmediatez, el instante. Por un lado, eso está muy bien porque no te aferra a aquello que no te pertenece, pero por otro hace que la vida no se disfrute tanto como cuando la aprovechas de verdad.

Creo que es importante introducir el post de hoy así, por el hecho de lo importante que es vivir en el presente y saber manejarlo. Una persona que vive en el presente, no se preocupa por lo que llegará en el futuro, si no que entiende que cada día es una nueva experiencia diferente, y un error, al día siguiente quedará arreglado. Es bonito, como las personas saben perdonar y volver a empezar una historia, pero como todos sabemos, siempre quedan las huellas del pasado.

Por un lado, tenemos el presente, cargado del ahora, del vive el momento y no te preocupes por lo que venga, solo trabaja día a día. El presente ayuda a tener claro cuáles son tus objetivos, a saber hacia donde caminas, y que cada problema, tendrá una solución en los siguientes días. Es lo curioso de vivir en el presente, que solo sabes lo que vives y no te preocupas por el resto. Los grandes pensadores y emprendedores más exitosos de este país, tienen dos elementos muy importantes que les caracteriza: dinero y vivir en el presente. El dinero no deja de ser un bien material, pero vivir en el presente es algo casi espiritual, por lo que supone para un ser humano hacerlo. Es complicado al principio, cuando tienes un mal día y ya das por hecho de que será mala semana. Error, un día es ese día, no el siguiente.

Por otro lado, mirar hacia el futuro, tiene sentido cuando lo hacemos con perspectiva y sin asumir nada antes de tiempo. El presente da lugar al futuro, el éxito futuro, es fruto del esfuerzo en el presente. Y nadie que quiera cumplir sus objetivos en la vida, te dirá lo contrario. A veces, el proceso es tan sencillo como simplemente, no hacer nada durante 10 minutos, para tener claro lo que significa vivir en el ahora.

Mi inspiración, será mucho mayor, cuando tenga el suficiente tiempo como para pensar en ideas, para darle vueltas y para llevarlas a cabo. Por eso, es importante desconectar y simplemente concentrarte en las ganas que tienes de no hacer nada, ni siquiera pensar durante un rato. Eso, es lo que hace que tu mente se refresque y no muera intentando crear el proyecto que cambiará el mundo.

Este post lo he escrito a raíz de ver este vídeo de Ted.

Creo que después de ver el vídeo, vuestra idea de lo que estáis haciendo con vuestro día, cambiará radicalmente, y empezaréis a ser esas personas que entienden que su pasado les ha construido como lo que son ahora y que el futuro, es tan solo, un amigo al que hay que chocar los cinco. Eso es lo único, de lo que preocuparse.

Que tengáis buena tarde y empecéis a vivir en el presente.