top of page

¿Estás ahí?

  • Sergio Belver
  • 29 dic 2016
  • 2 Min. de lectura

Hola, necesitaba escribir hoy porque anoche antes de irme a dormir y con la luz apagada di vueltas a mi cabeza, y hacía bastante que no lo hacía. El resumen de la noche de ayer para mí sería como una peli de Won Kar Wai, muy bonita pero muy contemplativa.


De vez en cuando está bien desde mi punto de vista tener diálogos contigo mismo para entenderte, para saber hacia dónde avanzas, que te mueve, en definitiva por qué te levantas cada mañana. Yo he llegado a la conclusión de que tengo una ligera atracción hacia lo difícil, hacia aquello que me complica la vida supongo. También de que tengo algo de falta de trato humano y supongo que recurro a las tareas para olvidarme de la falta de vínculo afectivo que necesito. Y no es malo, hay mucha gente que no entiende que te puedes sentir solo de vez en cuando aunque estés rodeado de gente que te quiere.



Todo esto sucede porque en nuestra cabeza está idealizado eso de encontrar a alguien que sea como un alma gemela, alguien que te escucha sin pedir nada a cambio, que te abraza aunque sea a distancia cuando más lo necesitas. Y sí, claro que existe. Mírate al espejo, idiota, eres tú.


También darte cuenta de esto no hace que olvides que necesitas encontrar a gente que te llene por dentro y por fuera. Si lo hacen por dentro, créeme que te vas a olvidar de lo demás porque llegará solo. Es difícil y te vas a frustrar continuamente, y algunos días es como si una piedra gigantesca se pusiese en el pedal del acelerador y no te dejase avanzar. La vida al parecer funciona por una sucesión de los días, pero esos días necesitas que cuenten.


Yo nunca o casi nunca me hago notar. No me gusta destacar, me gusta más escuchar que soltar mentiras y batallitas que supuestamente me han pasado cuando no es así. Creo que hablar más y callar menos nos hace estúpidos y a las personas que nos escuchan les hace perder segundos valiosos de vida. Hacerse notar requiere más de comunicación no verbal que de palabras y os sorprenderíais de la cantidad de emociones que se transmiten a través de una mirada.


Una mirada que entra dentro de ti y te quema, eso, eso sí que llena de verdad una vida y no un simple hasta luego por una calle perdida en un barrio de moda. Cuando descubramos que la vida es más fácil de lo que parece, nos relajaremos y todo fluirá.


Por cierto, Feliz Navidad a todos.


 
 
 

댓글


Entradas destacadas
Entradas recientes
Archivo
Buscar por tags
  • Black Twitter Icon
  • Facebook Round
  • Vimeo Round
Sígueme
  • Black Twitter Icon
  • Facebook Round
  • Vimeo Round
  • Black Twitter Icon
  • Facebook Round
  • Vimeo Round
bottom of page